24 de diciembre
Navidad de 2024
Casa de Sant Pol de Mar
(Mediterráneo Catalán)
Cuando era niña esperaba con ansia el tiempo de la Navidad y la Noche de Reyes. Me encantaba armar el pesebre con mi abuela, con mi madre y después jugar con él.
Han pasado tantos años desde entonces…
Y la Navidad para mí sigue siendo puro asombro, alegría, amor y milagro. Un tiempo de milagros, de familia, de regalos y de abrir el corazón al hermoso Niño que nace, cada año, en la noche del 25 de diciembre y nos trae la Redención.
La Navidad es belleza profunda y por tanto, profunda poesía.
Te deseo una muy feliz Navidad, un encuentro amoroso con el milagro, y que tu corazón pesebre esté preparado para acoger al Niño y adorarlo como hicieron los pastores y los Reyes Magos.
¡Feliz Navidad!
Con amor,
Dinorah
P.D.
Dice Chesterton: “La idea de encarnar la benevolencia -es decir, la idea de ponerla en cuerpo-, es la enorme y primigenia idea de la Encarnación. Un regalo de Dios que puede verse y tocarse es todo el centro del epigrama del credo. Cristo mismo es un regalo de Navidad. La nota de la Navidad Material, la dan, incluso antes que Él naciera, los primeros movimientos de los Reyes Magos y la Estrella. Los Reyes acuden a Belén trayendo oro, incienso y mirra. Si solo hubieran traído la Verdad, la Pureza y el Amor, no habría habido arte cristiano ni tampoco civilización cristiana”.
Navidad es un tiempo de regalos y aquí te dejo el mío: un cuento que se llama “Los Duendecillos”, de los hermanos Grimm.
Un cuento que puedes ver, escuchar, sentir y, también, regalar.
Un abrazo grande,
¡Salud y Cuentos de Hadas!
Dinorah Arrillaga Yunes
@dinoraharrillaga