«El mundo es como el sueño soñado por un solo soñador. Todos los personajes del sueño están soñando también. Ellos están soñando sus vidas y todos los sueños se coordinan en una misteriosa armonía.»
(Arthur Schopenhauer)
Lunes 30 de agosto de 2021 IG Live con Catalin Rotarescu @kato.terapia
Hablaremos sobre el » Mito Cotidiano «.
17h España
10h México
12h Uruguay
Los ojos del cazador, fijos en Blancanieves. Ella devolviéndole la mirada. El lento cuchillo que vuelve a su funda. La mano que se relaja.
Me metí en la boca del lobo
Caperucita Roja sintiendo miedo al entrar en casa de la abuelita. ¿Qué me pasa? ¿Por qué? – se pregunta. Igualmente, entra.
Estaré soñando
En la penumbra de la habitación, rodeada de rosas, la Bella Durmiente despierta, en el preciso momento en el que un hombre hermoso, la besa.
Tres momentos, para mí, gloriosos, de tres grandes obras literarias. Momentos que me sugieren reflexiones y me cuentan muchas cosas. Momentos que forman parte de mi vida. Situaciones simbólicas por las que he pasado muchas veces.
El mito nuestro de cada día…
Preparando nuestro próximo curso con Catalin Rotarescu (@kato.terapia), «Mito Cotidiano«.
Las ilustraciones:
Blancanieves, de Iban Barrenetxea;
Caperucita Roja, de Isabelle Anglade;
las dos de «La Bella Durmiente», de Arthur Rackham.
El espíritu del valle nunca muere. Es la Hembra Misteriosa. La puerta de la Hembra Misteriosa es la raíz del Cielo y la Tierra. Parece permanecer para siempre. Su eficiencia es inagotable.
Lao Tse (Tao Te Ching)
Lo femenino, esa cualidad que vive en todos, seamos mujeres u hombres, como un valor esencial, como un tesoro.
Lo femenino, que en los antiguos cuentos puede ser la princesa o la campesina sabia transformada en heroína, o la hembra sapo, que vive bajo tierra, capaz de traer la prosperidad al reino… Escondida en todos nosotros una voz sutil y cristalina nos invita a recibir el infinito. Permitirnos escuchar, y dejarnos guiar por esa suave voz, requiere calmar algo en nuestro interior, abrirnos a nosotros mismos, dejar que la vida nos atraviese y, a la vez, sentir la presencia de la muerte recordándonos la poesía de lo efímero, el valor de cada momento.
Aprender a entrar, y habitar, ese lugar silencioso y misterioso, elusivo y esquivo, vacío y lleno, pequeño y grande, receptivo y bello, es nuestro reto como seres humanos. Aprender a entrar y habitar “el sentimiento”, “el sentir”… ¡qué maravillosa revolución haríamos!
Lo femenino en una consulta:
La escucha receptiva, el fluir, ir más allá de lo aprendido, observar, observarme, sentir al otro, sentirme a mí, entrar en el sentimiento, acoger, vivir el misterio del otro y el propio, poner límites, sentir la belleza de la vida y el consejo de la muerte, vivir la kinesiología como una experiencia cada día diferente.
En su libro “El héroe de las mil caras”, Joseph Campbell cuenta que el viaje del héroe comienza con la Llamada a la Aventura, que “representa el inicio de un misterio de transfiguración, un rito o un momento de transformación espiritual, que se completa con una muerte y un nacimiento. Los horizontes conocidos se han ampliado, los antiguos conceptos, ideas y sentimientos ya no nos sirven: ha llegado el momento de traspasar el umbral”.
Decidir seguir la llamada, llegar al umbral y traspasarlo. Un mundo hasta ahora conocido queda atrás. Hacia adelante, más allá de ese umbral, están el camino y el misterio. La aventura llama a nuestra puerta como en los cuentos: el rey necesita el “agua de la vida” para poder vivir y el hijo parte a buscarla; el padre trae la “alondra cantarina” que la hija le ha pedido pero, a cambio, ella deberá ir a vivir con un león, y la hija se pone en marcha. La aventura nos llama y podemos elegir quedarnos en el reino de lo conocido y, seguramente, debilitarnos o, siguiendo el llamado, traspasar el umbral y comenzar a transitar el camino, que sabemos no será fácil y, sin embargo, está lleno de fuerza y sentido. Pelearemos contra monstruos, desfalleceremos, y a pesar de todo, una fuerza encarnada por una anciana sabia, un zorro que habla, un hada, nos ayudará y nos dará el coraje para seguir adelante. ¿A dónde llegaremos? ¿A ser soberanos de nosotros mismos? ¿Al infinito? Quién sabe… Cada cual tiene su propio viaje, su propia meta, su propio encuentro con el alma.
La aventura llega cuando uno está disponible para ella.
En mi trabajo como kinesióloga emocional escucho magníficas historias personales. Historias de gente que ha seguido esa llamada y comenzado un camino de búsqueda, tal vez porque algo grande ha pasado en sus vidas (una muerte, una ruptura amorosa, una depresión); o porque ya no pueden sostener una manera de vivir; o porque habiendo llegado al lugar al que querían llegar descubren que se sienten frustrados y carentes de sentido. La búsqueda. La llamada. Aventurarse. Entrar en el bosque interior y recorrerlo. Me siento honrada al acompañar a héroes y heroínas por estos caminos. Escuchar sus historias, ver a la persona que está frente a mí contándome lo que siente, lo que le duele, lo que ama, lo que le da fuerzas para vivir. Escuchar más allá de mí y, a la vez conmigo, la voz del otro, sus gestos, su emoción, su energía. Dejar atrás mis proyecciones, abrirme al misterio del otro. Dejarme guiar por el testaje kinesiológico.
La kinesiología: esa anciana sabia, el zorro que habla, el hada…